Así reducimos el impacto ambiental con el compostaje
En Sodexo implementamos una solución que, a partir del compostaje, logramos reducir la huella de carbono, obtener abono para las plantas y eliminar algunos gastos operativos por medio de la economía circular.
El compostaje es el proceso biológico aeróbico, donde los microorganismos actúan rápidamente sobre la materia biodegradable como son los restos de comida, las cáscaras de frutas y verduras, la hojarasca, las toallas de papel y las servilletas, permitiendo obtener compost.
Sin embargo, este método de compostaje no es el modelo clásico a cielo abierto que permite la producción de malos olores, lixiviados, atracción de roedores, moscas o plagas. Al contrario, es un sistema desarrollado por un proveedor con prácticas sostenibles que nos brinda diferentes ventajas en las operaciones para el tratamiento de los residuos ordinarios y orgánicos.
En los residuos ordinarios están las toallas de papel, las servilletas, el resultado del barrido de las instalaciones y de zonas comunes. Por su parte, los residuos orgánicos provienen de las sobras de los platos que los usuarios generan en las operaciones donde brindamos nuestros servicios de alimentación. Estos residuos tienden a irse a los rellenos sanitarios y generar gases efecto invernadero, y también otros gastos asociados al servicio de aseo en los servicios públicos.
Por eso, desde el sistema autónomo de compostaje se genera un compost que es utilizado en las zonas verdes de las instalaciones de nuestros clientes, tanto para jardines externos como para jardinería ornamental, logrando constituir una economía circular al no sacar los residuos generados, sino aprovechándolos en las mismas instalaciones.
¿Cómo funciona el sistema de compostaje?
En Sodexo ofrecemos una solución que se adapte a la cantidad de residuos ordinarios y orgánicos que se generen en la operación de cada cliente. Los residuos son recolectados por nuestros colaboradores, luego se depositan en los contenedores y se realiza la mezcla con aserrín y viruta para que 30 días después quede listo el compost para las plantas del lugar. Este compost tiene propiedades organolépticas patentadas por el laboratorio de la Universidad de Antioquia en Medellín.
Antes de que existiera esta solución, los residuos eran recolectados por un gestor de residuos enviado por las empresas de servicios públicos para darles su disposición final y no se tenía la trazabilidad, contrario a lo que sucede ahora porque ya sabemos cuánto estamos generando, cuánto estamos aprovechando y no estamos teniendo un impacto de huella de carbono por el transporte de residuos y por la generación de gases de efecto invernadero.
Cifras
De enero a noviembre de 2023 se han compostado 940 kilogramos de residuos de alimento, con un promedio de 85 kilogramos mensuales. De estos, 286 kilogramos se han usado como abono para las plantas, registrando un promedio por mes de 26 kilogramos.
Gracias a estas cifras, se ha logrado reducir el envío de residuos al relleno sanitario en un 31% y las zonas de compostaje han demostrado permanecer libres de moscas e insectos, malos olores o de lixiviados.
Beneficios del compostaje
- El sistema autónomo de compostaje reduce el impacto en huella de carbono de las operaciones porque se aprovechan los residuos orgánicos y residuos ordinarios.
- Generación de material orgánico para abonar las plantas para jardines internos o jardines externos y evita la compra de abono o usar productos químicos.
- Ahorro en pagos a proveedores recolectores de residuos y disminución en pago por el servicio de aseo brindado por las empresas de servicios públicos.
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